2014/08/05

249005.- Incredulos?

The Iron Pillar at Delhi ... La columna de hierro que no se oxida



Tiene 7 metros de altura, 1,5 de diámetro y pesa 6 toneladas. Fue levantada por el rey Chandra Varman en el año 400 d.C.

Es de hierro. Pero de hierro peculiar: pese a los avatares sufridos se encuentra en perfecto estado de conservación, como si por ella no hubiera pasado el tiempo. Se la conoce por Iron Pillar y ha despertado el interés de profanos y especialistas en cuanto a sus cualidades, fecha y rareza.
Tiene por tanto más de mil seiscientos años de antigüedad y aunque pueda parecer sorprendente, su aspecto sigue siendo el mismo ... pese a ser de hierro.



A las afueras de la capital de la India, hacia el sur, se hallan las ruinas de la que fue la primera ciudad islámica. En el patio del templo de Qutub Minar, en Nueva Delhi, se levanta la Torre de la Victoria, el minarete islámico más alto del mundo, con 72,5 metros de altura que empezó a edificarse en el siglo XII. 

La imponente figura de la Torre de la Victoria se va estilizando a medida que asciende hasta el cielo: empieza con un diámetro en la base de 14 metros y termina en la cúspide con un estrechamiento de 2,50 metros. Simboliza el dominio islámico sobre la ciudad. Tal cual. La Torre tiene cinco niveles distintos, cada uno de ellos con una balconada. Algo impresionante. A los pies de la Torre se encuentra la mezquita de Quwwat-ul-Islam, la primera que se construyó en la India o eso dicen. Una inscripción sobre su puerta oriental informa con tono arrogante y casi desafiante que fue edificada con material obtenido de la demolición de 27 templos idólatras.

En el patio de esta mezquita se encuentra ubicada la columna. Fue puesta allí hacia el siglo V, aunque según se deduce de la leyenda en sánscrito que aparece grabada en la misma, podría proceder de otro lugar.


En dicha inscripción no se explica el proceso de fabricación llevado a cabo para erigir la columna. Sin embargo, sí se aportan una serie de pistas que podrían despejar parte del misterio.
Los investigadores indios han propuesto que la columna de hierro inoxidable fue efectuada mediante un proceso conocido como "soldeo de fragua". Para ello, se habrían colocado uno sobre otro hasta 200 cilindros sólidos de hierro fundido que habría sido sometido a un eficaz proceso de tueste y fundido con carbón vegetal. Aún así, resulta difícil explicar cómo consiguieron la pureza de la columna, cifrada en el 99,78%, algo que nuestra metalurgia actual puede obtener, pero que se antoja más complejo comprender que se consiguiera en aquel tiempo.

Aún más difícil es explicar por qué no ha sufrido oxidación alguna. Durante los últimos años, la proliferación de agentes corrosivos y agresivos en el medio ambiente de la capital hindú ha ido en aumento de forma espectacular. Pese a ello, el hierro no ha sufrido las previsibles consecuencias de encontrarse en el corazón de una de las ciudades más contaminadas del planeta.


La profecía ...

Hay quien añade más misterio al asegurar que es una especie de iceberg férreo, del que sólo se ve una tercera parte. Dicen que, en realidad, no tiene siete sino 18 metros de altura y un diámetro de 41 centímetros en la base y de 30 en la cima. La columna visible no sobresale del suelo más que 6'60 metros. Se podría decir que está férreamente asentada al terreno. Tal vez eso justifique la inscripción profética que tiene en su base: “Mientras yo me sostengo, se sostendrá el reino hindú”.



Está demostrado que se trata de un pilar de hierro forjado con una aleación que no permite la oxidación.

En ocasiones podemos leer que es el famoso “pilar de Asoka”, erigido por el emperador Chandragupta, pero, por un lado, no es ese el pilar de Asoka, (emperador que vivió en el siglo IV a.C.) y, por otro, hubo varios monarcas con el nombre de Chandragupta antes y después de Cristo, según sea de la dinastía de los Maurya o de los Gupta.

Entonces ¿de qué fecha estamos hablando? El pilar  tiene una inscripción en la que, entre otras cosas, explica que fue construido como un homenaje al dios Vishnu y en memoria del rey Chandragupta II (siglo V d.C.) amante de las artes y coronado por una imagen del dios Garuda. 

Así que ya tenemos la fecha de su edificación. La mezquita, en cuyo perímetro se ubica la columna, se construyó en el año 1193 y está considerada la primera que se construyó en la India, pero el pilar es del año 400 d.C. lo que quiere decir que el templo se construyó alrededor de esta columna que ya se debía considerar sagrada. 


Su primer sultán, Qutb Ud Din Aibak, construyó dicha mezquita que, junto con algunos edificios cercanos, es lo único que sobrevive de aquella vieja ciudad. La pena es que los conquistadores musulmanes demolieron 27 templos hindúes y jainistas que se encontraban en los alrededores y utilizaron fragmentos de ellos para la construcción de la mezquita. Tan solo respetaron el pilar de hierro. ¿Por qué? Es lógico deducir que algo vieron en esa columna para conservarla a pesar de tanta barbarie.


Sobre el año 320 es cuando comienza el imperio de los Gupta y bajo los sucesivos reinados de Chandragupta, Samudragupta y Vikramaditya, la India del norte accedió a una especie de edad de oro cultural. Es la época en la que se puso fin a la redacción de las grandes epopeyas hindúes, como son el Mahabharata y el Ramayana y es la época de los famosos y espectaculares frescos budistas de Ajanta. Es un imperio que llega hasta el 575, año que empieza su decadencia. Ese siglo VI marca para la India del norte el nacimiento de una Edad Media semejante a la que conoce entonces Europa. Dividida e invadida, la India sólo recuperará su unidad con el advenimiento del imperio mongol. Como recuerdo de aquella época nos queda esta prodigiosa columna de hierro que, desafiando el paso de los siglos, apenas tiene vestigios de herrumbre. Es uno de los fenómenos metalúrgicos más curiosos del mundo. En Europa no se construyó ni una sola pieza de un tamaño similar hasta finales del siglo XIX. Como se sabe, el hierro se oxida con facilidad y mucho más en un clima tan húmedo como el de Delhi con sus periódicos monzones.


Un informe emitido por los metalúrgicos del Instituto Indio de Tecnología de Kanpur, el 18 de julio del 2002, dice: “Durante los tres años siguientes a la erección del mismo se habría formado, de manera natural, una fina capa de "misawite" compuesto de hierro, oxígeno e hidrógeno, que protege el pilar del hollínLa protección se formó por catálisis, gracias a una concentración importante de fósforo, debida a la fabricación del hierro por los antiguos indios que mezclaban directamente el mineral con carbón de leña. En otras palabras, el secreto de esa aleación es que contiene una inusitada proporción de fósforo. El hierro actual posee un 0,005% mientras que el material de esta columna contiene un 0,25%. De esta manera, el fósforo crea una película capaz de quemar el oxígeno exterior y proteger el conjunto de la corrosión y los estragos del tiempo. El hierro así tratado es más resistente y duradero”.

Lo que no han señalado estos expertos es cómo pudieron conocerse tales técnicas en tiempos tan remotos.

El misterio está servido!